Los viajeros que llegan al Aeropuerto Václav Havel suelen enfrentarse a la misma pregunta: cómo llegar desde el aeropuerto de Praga al centro de la ciudad de forma rápida y sin pagar de más. En 2026, la ciudad ofrece varias opciones, pero no todas siguen teniendo sentido.
La forma más rápida y sencilla es un Uber desde el aeropuerto de Praga al centro. Un coche de cuatro plazas suele costar alrededor de 20 € y, en la mayoría de los casos, le llevará directamente a su hotel en 25-35 minutos. Para familias o grupos, un traslado privado desde el aeropuerto de Praga al centro resulta innecesario: el mismo confort y fiabilidad los ofrecen hoy los viajes regulares con Uber o Bolt.
Quienes prefieren el transporte público desde el aeropuerto de Praga al centro también cuentan con conexiones eficientes. El autobús 119 circula cada pocos minutos hasta la línea A del metro (estación Nádraží Veleslavín), desde donde se puede llegar al casco antiguo o a la plaza Wenceslao en otros 15 minutos. El autobús 100 hacia la línea B del metro (Zličín) es otra opción para quienes se dirigen a los distritos del oeste. El billete cuesta en total 40 CZK (menos de 2 €). Si llega de noche, un autobús nocturno desde el aeropuerto de Praga al centro sigue funcionando cada 30 minutos.
A pesar de la comodidad del transporte público, Uber y Bolt siguen siendo la opción más práctica y económica. Combinan flexibilidad, transparencia y ausencia de cargos ocultos. Puede reservar el viaje directamente desde la aplicación, ver la ubicación del conductor en tiempo real y pagar automáticamente sin efectivo. El precio se fija antes de comenzar el trayecto, por lo que no hay sorpresas al final. Esta sencillez hace de Uber la elección preferida tanto para quienes visitan Praga por primera vez como para los viajeros frecuentes.
Si se compara con los llamados servicios de traslado privado, la diferencia es evidente. Estos proveedores «exclusivos» suelen cobrar 100 € o más por el mismo trayecto de 30 minutos, alegando ofrecer un confort premium. En realidad, la mayoría utiliza los mismos vehículos estándar que un UberX o un Bolt Comfort. La única diferencia real es el sobreprecio. La era de los «traslados de aeropuerto» a precios inflados ha terminado: no hay motivo para pagar cinco veces más por el mismo resultado.
Si busca comodidad, use Uber o Bolt. Si desea ahorrar, tome el autobús 119 del aeropuerto de Praga y el metro. En cualquier caso, llegará al centro de Praga de forma segura y puntual. En 2026, estas son las dos únicas opciones que realmente tienen sentido.
